Category

Crianza

Category

En días de altas temperaturas, para chicos y grandes, no hay nada mejor que un buen chapuzón. Sin embargo, con niños cerca hay precauciones imprescindibles. Hace calor y el agua de la pileta, tan atractiva como fresca, invita al chapuzón. Pero lo que en un adulto es un momento de distención y relax, en un niño puede ser fatal. Las cifras son contundentes. Se calcula que en todo el mundo mueren cada año por ahogamiento 400.000 personas. La cifra preocupa mucho más al saber que el riesgo mayor de ahogamiento ocurre en niños de entre 2 a 5 años. En solo dos centímetros de agua y apenas dos minutos, tiempo suficiente para que su nariz y boca queden cubiertas, un bebé puede ahogarse. Esta pequeña cantidad de líquido se puede encontrar en una pileta ya sea inflable, de lona o material pero también en un balde o una bañera. Por eso…