Algunas creencias populares nos hacen correr a la guardia pediátrica. Pero a no asustarse, la mayoría son incorrectas.

En la crianza de los bebés existen ciertas creencias que se dan por ciertas y que poco tienen que ver con la realidad. Algunas recomendaciones están basadas en ideas antiguas de cuando se desconocían ciertas enfermedades. A pesar de todo, algunas ideas se mantienen hasta nuestros días y suelen preocupar a los papás y ser motivo de consulta. Federico Díaz, pediatra (MP 232337) nos cuenta seis mitos que suele escuchar en la consulta  y nos brinda la respuesta adecuada.

1. “La leche en polvo constipa al bebé”

Eso no es así. Muchas veces lo que influyen son los cambios de leche como cuando de una lactancia materna se pasa a otra de fórmula o cuando se pasa de una fórmula líquida a otra en polvo. Esos cambios sí pueden generar constipación. Lo que es importante es leer con atención cómo es la preparación para no diluir demás la preparación en polvo pero tampoco quedarse corto con el agua.

2. “La salida de los dientes da fiebre”

Equivocado si fuera así tendríamos treinta dos registros febriles por cada diente que sale y eso no ocurre. Sí es verdad que muchas veces la dentición puede provocar dolor y una elevación de la temperatura corporal pero no una fiebre sostenida.

3. “Mi bebé tiene moco verde ¿precisa antibióticos?”

Muchas veces se asocia a los mocos verdes con una infección que debe ser tratada con antibióticos algo. El color de los mocos se ve influido por distintos factores y el verde lo que presenta es mayor cantidad de células, más sedimentos y suele ser más profundo, desde los pulmones. Pero no por estas características es que se necesiten antibióticos para poder resolverlos.

4. “Para largarse a caminar primero debe gatear”

Es otra creencia muy frecuente, pero errónea. El gateo puede o no estar presente durante el desarrollo del bebé. Ocurre cuando el bebé tiene la necesidad de hacerlo o se lo estimuló a que lo haga con el movimiento libre. Pero muchos bebés no lo hacen y se largan a caminar sin gatear previamente.

5. “Si llora es porque tiene hambre”

Los bebés lloran porque tienen una necesidad. Puede ser hambre, pero también que sientan frío, calor, alguna incomodidad porque se ensució. Lo que sí es cierto que cuando lloran lo que precisan es la atención de un adulto, pero no que solo lloran por hambre.

6. “A los recién nacidos hay que ponerles una faja en el ombligo”

Esto tampoco es así. Es común que un bebé nazca con la hernia umbilical, ese ombligo hacia afuera. Es una situación normal porque todavía los músculos del abdomen no están desarrollados. Sin embargo y no por eso, necesitan una fuerza externa que los comprima. Solo será necesario controlar con el pediatra que todo se encuentre bien y con el tiempo se irá acomodando.

Avatar photo
Autor

Escriba un Comentario