La costra láctea o dermatitis seborreica es una afección muy frecuente que presentan la mayoría de los bebés sanos. De origen desconocido, no suele traer síntomas molestos y rara vez se ve una complicación.
A muchos bebés les aparecen algunas rojeces e incluso pequeñas costras por las zonas de mayor descamación, como el pelo, al poco tiempo de nacer. Esto se conoce como costra láctea o dermatitis seborreica del lactante.
“La costra láctea es autolimitada. Es decir que se va sola y no hay que hacer absolutamente nada. A medida que el bebé crece, desaparece”, tranquiliza Lucía Sabbione, médica pediatra (MN141220).
A algunos papás, por un tema estético, les molesta verla. En ese caso la especialista señala que “se puede usar óleo calcáreo o aceite de almendras una o dos horas antes de bañar al bebé y durante el baño con una tarjeta blanda o una esponjita ir sacándole las costras”.
Sobre su origen existe la falsa creencia de que se debe a malos hábitos higiénicos. Sin embargo, se desconocen las causas, aunque existen dos hipótesis. La primera señala que las hormonas maternas que quedan circulando en la sangre del bebé, después del parto, activan las glándulas sebáceas y estas empiezan a producir sebo, una sustancia oleosa (mezcla de grasas) que en condiciones normales contribuye a la hidratación de la piel. La sobreproducción de este sebo hace que los corneocitos (células muertas de la última capa de la piel) en lugar de desprenderse, queden adheridos.
La otra hipótesis afirma que se debe a la presencia en exceso de una levadura (tipo de hongo) llamada Malassezia. En los bebés con costra láctea, esta levadura descompone el sebo consumiendo los ácidos grasos saturados y dejando libres a los ácidos grasos insaturados. Estos, como todo residuo, se empiezan a acumular y se inicia un círculo vicioso.
Aunque parezca que pueda molestar al bebé, la costra láctea aislada no suele traer síntomas molestos y rara vez se ve una complicación. Por eso Sabbione explica que solo será necesario consultar con un dermatólogo infantil cuando “es muy extensa, cuando pica o cuando se acompaña de inflamación”.